Fernando Bermúdez pieza clave en los negocios de Alex Saab y Álvaro Pulido
La corrupción en Venezuela es un problema circular y sin fin. Tiene tantas facetas que puede resultar difícil de comprender para los que no son venezolanos y lo ven desde fuera, pero en esta ocasión entra en juego España, el destino favorito de los chavistas que huyen y se ocultan. Ahora le ha llegado el momento al «empresario» Fernando Bermúdez Ramos, que está bajo la lupa de las autoridades españolas por supuestamente lavar dinero, procedente de negocios hechos con el chavismo y por ser uno de los brazos del empresario colombiano Alex Saab.
A Bermúdez se le relaciona con el colombiano Álvaro Pulido Vargas, otro «empresario», que ha sido acusado de ser el presunto testaferro de Alex Saab, que está encarcelado en Estados Unidos desde el 16 de octubre de 2021, enfrentando cargos por lavado de dinero, y que además ha sido respaldado por el régimen de Nicolás Maduro como un supuesto diplomático venezolano.
Estos personajes se habrían convertido en los proveedores preferidos del régimen de Maduro para surtir a Venezuela de alimentos a través de los Comité Locales de Abastecimientos y Producción (Clap) y otros negocios que abarcaban desde la venta de petróleo hasta la importación de medicinas, mediante contratos millonarios que fueron otorgados a dedo durante años.
Las autoridades españolas ya cuentan con una serie de documentos en los que habría información sobre los nexos que tendría Bermúdez con toda la red corrupta de Álvaro Pulido y Alex Saab. Este personaje tiene una residencia legal en España, obtenida por ser pariente de un ciudadano de la Unión Europea. En la actualidad se desconoce su ubicación en la península, pero la Policía Nacional ya abrió una investigación, tras la denuncia presentada por el abogado venezolano Salvador Pimentel, según Moncloa.com.
Pulido ha caído en desgracia y fue detenido por la Policía Anticorrupción de Nicolás Maduro el pasado miércoles y llevado a los tribunales como un supuesto operador financiero vinculado con el exdiputado chavista Hugbel Roa que también está preso desde hace varias semanas, y se le conoce por ser pieza del también exministro de Petróleo de Venezuela, Tareck El Aissami; Tanto Roa como Pulido han sido acusados por las autoridades del régimen de Nicolás Maduro de estar presuntamente involucrados en la trama de corrupción de la estatal petrolera venezolana, Petróleos de Venezuela (PDVSA).
El colombiano Álvaro Pulido, cuyo nombre real era Germán Rubio Salas, y Alex Saab son señalados por las autoridades de Estados Unidos por presuntamente conspirar para lavar dinero y por lavar dinero, además de ser acusados por haber recibido contratos adjudicados del régimen de Nicolás Maduro, hacer pagos a funcionarios para conseguir estos contratos, así como la distribución de los productos obtenidos a través de los contratos que les otorgaban de manera fraudulenta, todos ellos relacionado con una de las tramas de corrupción más grandes que le ha explotado al chavismo, como son las cajas de comida los Comité Locales de Abastecimientos y Producción (Clap).
Aquí es donde entra Fernando Bermúdez, a quien acusan de estar involucrado también en el escándalo de corrupción de PDVSA y los criptoactivos. Inicialmente el fiscal general de Venezuela había dicho que Bermúdez estaba preso, pero unos días después corrigió y dijo que se encontraba fugitivo en España. Sin embargo, y a pesar de la detención de Pulido Vargas, el régimen de Nicolás Maduro no ha dicho ni una sola palabra de su relación con Alex Saab y lleva tres años defendiendo en el ámbito internacional a Saab, diciendo que era un diplomático y acusando a Estados Unidos de haberlo raptado tras haber logrado que lo extraditaran desde Cabo Verde.
Investigaciones periodísticas, que datan de 2019, habían destapado la olla de corrupción de las cajas de alimentos Clap, mencionan a Álvaro Pulido y a Saab como contratistas del Estado venezolano y múltiples nexos con Emmanuel Rubio González, Amir Nassar Tayupe y Fernando Bermúdez Ramos, a través de empresas registradas en Panamá con las cuales obtenían jugosos contratos con el régimen venezolano para vender alimentos.
Una de las empresas de Bermúdez, FB Foods, que aparece registrada en Caracas y que posteriormente aparece como copropietaria de la empresa que fue registrada en Panamá, donde también estaba registrada la compañía Global Food Trading. Ambas fueron constituidas por el bufete panameño La Fuente & Saldaña y se utilizaron para hacer negocios con el régimen de Nicolás Maduro, a través de la importación de alimentos a Venezuela.
Una investigación publicada por la página Armando Info indica que entre las facturas por pagar de la estatal petrolera venezolana, aparece un impago de 1500 millones de dólares que estaría supuestamente relacionado las 19 empresas que controlaban Pulido y Saab entre 2019 y 2020.
Para el momento en que se publicó el reportaje de Armando Info, solo se conocía que las autoridades del régimen de Nicolás Maduro habían realizado un allanamiento en una residencia que Pulido tenía en Caracas, pero unos pocos días después fueron ellos mismos quienes anunciaban que lo habían detenido y llevado a los tribunales, aunque no se llegó a decir qué cargos le atribuían.
Sin embargo, y a pesar de que las pruebas son evidentes, el régimen de Nicolás Maduro no ha mencionado ni una sola palabra sobre los nexos entre Pulido y Saab, pero en cambio sí han pedido a España que extradite a Fernando Bermúdez y a otros presuntos implicados con toda la red de corrupción de PDVSA en Venezuela.
Portal de Noticias con Inteligencia Artificial | [email protected]